viernes, 16 de marzo de 2012

LA EDUCACIÓN SUPERIOR COMO RIESGO SOCIAL

A los múltiples retos que enfrenta la educación superior en el mundo de hoy, muchos de los cuales se han venido discutiendo en Colombia a raíz de una posible reforma a la Ley 30 de 1992, se suma ahora el debate de la universidad como amenaza para la sociedad. Hace unos días, Rick Santorum respondió a un propuesta de Barack Obama para brindar acceso a la educación superior a todos los americanos, que: Hay hombres y mujeres buenos y decentes que salen a trabajar duro todos los días y ponen a prueba sus habilidades, las cuales no les fueron enseñadas por un profesor liberal universitario tratando de adoctrinarlos”.  
El ataque de Santorum, quien ahora ha criticado a Obama por disculparse ante la matanza de civiles en Afganistan, no es nuevo. Se ha venido formando una percepción de la universidad como una institución liberal y anti religiosa, lo cual puede obedecer a su papel en la formación del pensamiento crítico y su misión como actor fundamental de desarrollo. Sin embargo, concluir con ello que la universidad constituye un centro de adoctrinamiento de quienes en ella participan es ir demasiado lejos.
En los infinitos debates sobre autonomía universitaria es fácil caer en lugares comunes o contenidos vacíos. Muchas veces me he preguntado por el alcance de esta autonomía, si a muchos interesa sólo  para proteger su producción mediocre o para esconder intereses oscuros. Pero cuando se plantean estas cuestiones, hay que aceptar que se requiere de una autonomía robusta, capaz de preservar a la educación superior de poderes ajenos a ella y dotarla de la capacidad de avanzar libre y universalmente, para cumplir con la misión encomendada por la sociedad a la que pertenece.

GERMÁN VILLEGAS G.

No hay comentarios:

Publicar un comentario